lunes, junio 28, 2004

El primer año del resto de nuestras vidas


Quisiera encerrar en este corto espacio la dicha y la alegría que has traído a mi vida. Comienzo de nuevo. Quisiera tener las palabras para agradecerte estos 10 meses de paciencia que has tenido para restaurar mi vida, ésa otrora decreciente y en perpetua melancolía.
Han sido momentos felices en su mayoría, memorias que hemos podido acumular, como aquellas piedras de colores en la arena, cuando tú y yo solos nos tiramos en el piso como locos, para recolectarlas para guardarle un tesoro al que sería nuestro primer hijo (y eso que aún ni teníamos la menor idea de que existiría).
Enorme es tu presencia y llena todo lo que mi historia a querido de siempre por compañía. Las horas que he pasado lejos han sido de locura, de arranques y de instintos asesinos que voy refrenando por procurarte a la mañana que me espera siempre en tus brazos. La mañana no es igual sin tus brazos.
Han sido noches de dolor, de llanto, de silencios que hemos logrado desvanecer con la convicción de seguir peleando con furia, unidos, en esta peculiar empresa que el destino nos marcó.
Desde que llegaste a mí, la percepción de los colores, de la gente y de mi propia imagen es distinta. Contigo he aprendido a ser tolerante y de cierta forma más congruente con los sentimientos. Eres la mujer, la única que puede tener la certeza de que por ti, he aprendido que el corazón aún marcha.
Esta en tus ojos mi hogar, eres mi cuerpo y aún sigo pasando las noches enteras recorriendo tu piel y de madrugada permanezco despierto, agradeciendo a la calma por esta tranquilidad que me has brindado.
Me has enseñado a no darle importancia a las víboras, a esas harpías que intentaron alguna vez (y de repente lo siguen intentando) a separarnos. Por ti sé que el amor es más fuerte que cualquier ponzoña, cerdos que intentan morder las perlas del collar que nos ha unido por convicción y que nos mantiene pendientes de lo mejor que está por venir.
Te amo Norma, mi compañera de viaje, feliz primer año. We still on the road babe.

3 comentarios:

Flakushis dijo...

Qué lindura. Es más bonito permanecer juntos cuando tanta gente se opone o busca separalos. Algo así nos pasó a nosotros... y míranos.
Muchas felicidades.

Mile dijo...

Quien te oyera... Neta que me da gusto saber que alguien a quien yo estimo mucho llegue al puerto indicado.. era cosa de tiempo... ahora la consigna es NUNCA LA DEJES IR!!! Un abrazo Mile

nacho dijo...

Órale, una carta de amor respetable (respetable la carta, el amor asumo que también). Un abrazo.