martes, octubre 12, 2010

A través de Facebook busca ayuda para construir escuela


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“Los árboles se conocen por sus frutos” me dice Javier Meléndez Cardona, presidente ejidal de El Ojo de la Casa, mientras tomamos un café esta mañana, en un conocido restaurante localizado en una de las principales avenidas de la ciudad.
El Ojo de la Casa, es un espacio donde se encuentra una vieja hacienda de tiempos revolucionarios en la que desde hace 18 meses ha trabajado en su remodelación y de la que ahora busca sea una opción turística y espacio cultural al sur de Ciudad Juárez.
Sin embargo, su presencia en el restaurante no es para comentar de los logros que han obtenido con creces en el ejido que tiene a su encargo, sino para ahondar en detalles en su peculiar iniciativa para conseguir a través de la red social Facebook, fondos para la construcción de aulas escolares en el jardín de niños de Samalayuca, cabecera municipal del ejido que preside.
Una noche antes, el lunes, me encontré entre mis contactos el mensaje que acababa de dejar en su muro, el cual llamó mi atención: “Necesito conseguir 800 blockes de concreto para construirle la primera aula al Jardín de Niños de Samalayuca” (sic).
De inmediato el llamado comenzó a tener eco en los distintos usuarios de la red social más usada hoy en día –se estima que tiene más de 500 millones en el mundo – y al encontrarlo en línea le pedí vernos al día siguiente para conversar sobre el particular.
Samalayuca es un poblado con aproximadamente 2 mil habitantes, localizada a 52 kilómetros al sur de Ciudad Juárez y en medio de la zona desértica conocida como los Médanos de Samalayuca.
Ahí los principales motores económicos son el cultivo de hortaliza y el trabajo en la cementera y la termoeléctrica que le circundan y en casos extremos, trabajar en Ciudad Juárez o emigrar a los Estados Unidos para enviar dinero para la manutención de las familias que ahí habital.
En el pueblo, sólo hay establecidos un jardín de niños, una escuela primaria y un espacio para telesecundaria y preparatoria abierta.
Javier señala que tomó esta determinación de pedir la ayuda global al ver la necesidad de un espacio digno para al menos medio centenar de niños que requieren los estudios preescolares, situación que ha obligado a las mismas madres de familia a reunirse en sus domicilios a impartir las clases.
“Es está necesidad de las más apremiantes, nuestras escuelas en Samalayuca no cuentan con domos como en Juárez para que los niños puedan practicar sus actividades deportivas y culturales, pero acá también se tienen climas más extremos en la región durante todo el año, es casi imposible para ellos estar a la intemperie”, indica.
“El pueblo en sí tiene muchas carencias, hace falta embellecer las calles, crear un comedor infantil, construir un gimnasio que sirva también para eventos comunitarios, necesitamos programas de salud y apoyo para nuestros adultos mayores”, agrega.
A Meléndez Cardona aún le resta un año y medio como presidente ejidal, sin embargo, revela que su intención en un futuro próximo es contender como presidente seccional de Samalayuca, donde asevera, la gestión hacia su tierra pudiera darse de manera más fuerte con las autoridades municipales.
“Pero eso habrá que verse hasta noviembre, ahorita lo importante es trabajar más allá del discurso, con acciones que reditúen en el beneficio de los habitantes del pueblo, acercando recursos gracias a la tecnología y la solidaridad que puedan darnos los usuarios de internet”, sentencia.
Y es que además de los bloques de concreto, también se solicitará a la población global el apoyo para acercar cemento, grava, varilla y arena, necesarios para la construcción. “De la mano de obra nos ocupamos los hombres y mujeres del pueblo”, asegura.
Mientras terminó de escribir este texto, me asomo al perfil de Facebook de Javier y encuentro una respuesta alentadora: “Ya sólo nos falta conseguir como 400 blockes de concreto de 15" para construirle su primera aula al Jardín de Niños "CONAFE" de Samalayuca”(sic).
Al igual que este soñador del desierto, que piensa en que en un día no muy lejano Samalayuca se convierta en un oasis donde las familias de la región puedan convivir de manera sana, lanzó esta botella al mar, esperando que llegue a las manos de algunos de los por lo menos 500 millones de habitantes de esta tierra virtual.

Para contactar a Javier Meléndez Cardona escriba a:

ojodelacasa@yahoo.com.mx