Tercera causa
OCÉANOS
En la pérdida de
dolor inmerecido
nada de desánimo
nada en el amor recuerdo
dijiste al
confirmar un pasado que ahora habito.
En la noche misma
este corazón habla
ya los párpados
cerrados en rojo sueñan
y el sonido de la
lejanía penetra en las heridas
es sólo una gota
de agua que cae desde el invierno.
De la casualidad
soy alguien que viaja
mujer dime la
clave
algo que suceda
alguien que no
sea sin ti
seamos iguales a
lo lejos
en una sonrisa, en
un leve movimiento.
Yo sabré así de tu
cuerpo,
asiré tu mirada
al horizonte
como náufrago en
busca de auxilio
nada más, nada
más
sobreviviré este
oleaje
otro día, hasta
alcanzar tu voz
al abrir los ojos
de mañana.