¿Una injusticia Ludvik?
Sí, ésa es la palabra que con mayor frecuencia pronuncia usted, cuando oye hablar de esta historia o de otras historias parecidas. Pero yo no sé lo que es la injusticia. Si no hubiera nada por encima de lo humano y las actitudes no tuvieran otro significado que el que le atribuyen quienes las adoptan, el concepto de ?injusticia? estaría justificado y yo también podría hablar de injusticia por haber sido más o menos echado de la granja estatal en donde había trabajado con empeño. Quizás en ese caso hubiera sido lógico que me rebelase ante esa injusticia y defendiese furiosamente mis pequeños derechos humanos.
Pero los acontecimientos suelen tener un significado distinto al que les atribuyen sus ciegos autores; con frecuencia no son más que órdenes ocultas que vienen de lo alto y las personas que los hacen posibles no son más que mensajeros inconscientes de una voluntad superior, de la que ni siquiera sospechan.
La Broma. Milán Kundera. Sexta Parte. Kostka,17.