Ahí les va su mega Marcha
"Porque somos más, Juárez por la paz", sí, este slogan tan absurdo como demagogo fue el que estuvieron manejando los diputados hace poco más de un mes cuando convocaron a una "mega" Marcha por la paz en la ciudad del Crimen.
Quisiera no ser irónico, ni siquiera poco objetivo, pero me gana la risa -que ya no sé si es un llanto disfrazado- al escribir esto, pero voy por partes, un revoltijo de antecedentes a continuación:
Esta ciudad, mi ciudad, la de todos y de nadie a la vez, es reconocida a nivel internacional por la ola de violencia que en ella impera, aunque el gobernador, el presidente municipal y los diputados de esta y otras administraciones insistan en decir lo contrario, este terruño se ha ganado a pulso el título de Ciudad del Crimen.
Yo mismo la menciono como tal, pero no en un afán peyorativo, sino con la esperanza de que algún antihéroe aparezca de entre las sombras de sus calles (¿un Charles Bronson tal vez?) y reivindique un poco la balanza a favor de quienes buscan vivir como la naturaleza humana manda.
Pero bueno, vuelvo al tema central, la mega marcha.
Harta la ciudadanía del clima insoportable impregnado de sangre e impunidad y cuya gota que derramó el vaso, hace un mes y medio aproximadamente fue el asesinato y violación de dos niñas de apenas siete y ocho años de edad -si mal no recuerdo-, hizo que la ciudad emitiera un grito de indignación como parecía que nunca antes se había registrado.
De hecho, la aparición del cuerpo de una de éstas infantes, Airis Estrella, aumentó el ardor en el ánimo de la ciudad.
Antes del hallazgo -Airis estuvo desaparecida varias semanas-, se tenía la leve esperanza de encontrarla viva, y eso motivó a una unión poco usual en esta región donde la impersonalidad es una de las principales características de sus habitantes.
La ciudad estuvo pendiente al caso e incluso se recurrió a los rezos masivos para pedir al Creador por dar con su paradero, pero nada de esto sirvió.
La menor fue encontrada en un tambo relleno de cemento, con severos signos de violencia sexual y múltiples contusiones, a los cuatro vientos por soluciones.
Obviamente que esta situación convirtió la región en un gran paño de lágrimas, se comenzaron a gestar campañas publicitarias -oficiales y por la iniciativa privada-, para dar con los responsables de esta agresión, en la que muchas familias se sintieron identificadas.
Sumado a este caso, las ejecuciones entre narcotraficantes y la guerra entre pandillas estuvieron a la orden del día y además, los robos, accidentes viales y abusos de diversa índole en los mismos hogares.
Aún así, el gobierno se queja de que se le llame a este paraje Ciudad del Crimen. Pero esa es bronca de ellos y sus ojos miopes, prosigo.
Una medida que surgió en ese tiempo y que hoy me hace escribir por su -¿cómo llamarle?- irónica constancia o mejor dicho por la falta de respeto que representó al dolor de esta tierra, fue la marcha a la que convocaron los diputados locales.
Veamos, sucede que ante la impunidad y la violencia a los legisladores no les quedó otra solución más que convocar ciudadanos en general que como ellos, están hartos de la violencia.
Por participar de la indignación no hay ningún problema, incluso hasta se les aplaude, pero por ¿qué hacerlo en su calidad de Congreso del Estado y organizando marchitas?
Lo peor del caso no es eso, sino que a la supuesta marcha ciudadana no acudieron sino estudiantes de secundaria y preparatorias, presumiblemente acarreados bajo pretexto de más puntos o en su defecto, tronarlos en los exámenes finales. Eran pocos los que se veían que habían acudido por su propio pie.
Yo trabajé ese día y me tocó verlo, nadie me lo contó. Los mensajes a favor de la paz que allí se dieron fueron fofos y aburridos, nadie se los creyó.
En resumen todos se refirieron a la violencia que se vive en Ciudad Juárez y señalaron que la única solución que existe es unirse en un frente común para frenarla y exaltar los valores ya que estos parecen haberse olvidado. Nada nuevo, ni una sola propuesta o anuncio de medidas extremas para eliminar de raíz esta puta problemática.
A ver, ¿para qué jodidos necesita el estado a un diputado marchando indignado por las calles de la ciudad?
¿No se supone que las marchas son para que los ciudadanos protesten contra los malos gobiernos que no saben atender sus demandas?
¿Por qué los diputados con todo el descaro que les caracteriza nada más pusieron su cara de inútiles y no asumieron como cuando gritaron como verduleras en ese evento y han dado algún viso de resultado desde su curul? ¿Una modificación a la ley contra agresores sexuales? ¿mayores penas para quienes porten armas de fuego? ¿cárcel directa a los policías que protegen a vendedores de droga al menudeo? ¿Nadita?
¿Con qué cara señores diputados, con qué pinche cara marchan y asumen derechos propios de los ciudadanos comunes y corrientes que los pusieron allí? ¿a quién le exigieron? ¿a ustedes mismos? ¿a Diosito? ¿Rogaban por que apareciera el Chapulín Colorado?
Explíquenme puta madre, porque desde hace un mes y días que hicieron su teatrito y no se ha visto un solo resultado que permita dormir con tranquilidad a mi ciudad, la de ustedes, la de todos, la de nadie a fin de cuentas y por el contrario, los delitos, asesinatos y la impunidad siguen visitando esta tierra, que por cierto se encuentra en días de feria.
Señores maestros de la ley, si quieren, si tienen la intención de hacer otra mega marcha, ahora en Chihuahua, la capital del Estado, ya que las ejecuciones entre narcos se les pusieron de moda por aquellos terruños, aquí les dejo una opción, para que de perdido, si les queda algo de vergüenza y respeto, saquen algo de provecho y aunque sea una sonrisa a mi pueblo tan vapuleado. Olvídense de promocionar ?mega marchas?, ya está visto que eso no es lo suyo, mejor promuevan a Mega Marge, como la verdadera defensora del seno familiar.
Y ya mejor le paro, porque si no van a hacer que me encabrone.
Sólo les recuerdo algo legisladores, cuando tomaron protesta juraron atender las demandas ciudadanas o de no ser así, que el mismo pueblo se los demandara, hoy, yo los demando, trabajen.
Suyo no tan afectísimo,
Zerk Montecristo
-Ciudadano-
